Tuesday, May 15, 2012

Echar a suertes... en mi pasado...

De cuando en cuando vienen a mi memoria unas palabras aprendidas en mi infancia y que, como tantas cosas de esa misma época, no tienen ningún sentido... Pero se han quedado ahí para siempre.

"De tin, Marín.
De Do pingüé...
Cúcara, Mácara, títere fue.
¡Yo no fui, fue Teté!
¡Pégale, pégale, que ella fue!
Tin pulsera, tabique y afuera,
para que siempre quedes tú,
y nadie más que tú"...

 Cada vez que tengo que echar algo a suertes, y a veces resulta vertiginosamente presente, resuena en mi cerebro la cantinela... "De tin, Marín..."

1 comment:

Raquel said...

Yo recuerdo aquellas otras de "Chorro, morro, pico, tallo, qué.." que se supone que nombraban a los dedos de la mano (vaya ud a saber con qué criterio elegidas, qué significado se le atribuían) en aquel juego "naturalmente bestia" de saltar sobre las espaldas de otros colocados en fila que más bien parecían la melé de un campo de rugby. Pero sí, ahí están, acomodadas en nadie sabe qué recoveco de nuestras neuronas, enganchadas a otros detalles de nuestra infancia. Quizás esas ilógicas retahílas nos enseñaran a buscarle los tres pies al gato a las cosas,a no creer en los caminos unívocos, a mirar siempre a las nubes que pasan cuando nos parece que entramos en vía muerta...