48 primaveras, todas juntas, empaquetadas como un tonel de vino...
Sombras de tormenta sobre la cabeza. Carrillo hinchado por una infección bucal, dolor intenso... Cuatro días fuera de combate...
Soledad anhelada, buscada, elegida, preferida, ... Casual, sin embargo; regalada...
Suena el teléfono, llegan SMSs, e-mails, cartas, chats...
Me siento abrumado... Creo estar solo (o al menos así me siento en lo más hondo de la cueva interior en la que siempre me refugio) y sin embargo son tantos, son tantas, (sois, perdón) los que me demuestran (demostráis) su (vuestra) cercanía, cariño, fidelidad...
Me siento, decía, abrumado...
Sólo puedo decir: Eskerrik asko! Thanks! Merci! ¡Gracias! Grazie!... ¡Qué lástima no saber más idiomas para seguir agradeciendo...!
1 comment:
Bueno, deberías saber a estas alturas que la cueva es opcional... y por lo tanto elegida.
Disfruta de la abrumadora mayoría que te quiere.
Madam Scissors
Post a Comment